Friday, July 28, 2017

Dejar el pasado atrás

La semana pasada, Necaxa comenzó con un triunfo el Apertura 2017 de la Liga MX, y lo hizo jugando en calidad de visitante en una cancha que en honor a la verdad suele sentarle bien al equipo, el Estadio Luis 'Pirata' Fuente de Veracruz.

Entendiendo que fue apenas el debut oficial de Ignacio Ambríz y de que se trataba de un encuentro de Jornada 1, es difícil exigir que se sea espectacular y a la vez efectivo, por lo que me parece es muy temprano para emitir un juicio sobre lo que podemos esperar de la Era Ambríz o del equipo en este Apertura 2017 o en la temporada 2017-2018. Se ganó y de momento es lo importante.

Para quienes escuchan el Podcast PR, no es un secreto que no me gustó la llegada de Ignacio Ambríz al banquillo de nuestro equipo, pero a final de cuentas, las decisiones que toma la directiva no son hechas en base a que le puede gustar a Gerardo Taker, a Juan Pérez o a Alfredo González.

La llegada de Ambríz no me gustó por lo que alguna vez declaró previo a enfrentar a Necaxa cuando dirigía a San Luis -una de las 72 versiones existentes del cuadro potosino-, y tampoco me gustó que se diera como sustitución de Luis Alfonso Sosa, técnico que regresó a Necaxa a la Liga MX y que numéricamente cumplió de gran forma en el año que dirigió en Liga MX.

Tampoco me gustó la salida -ni la forma en la que se dio- de Luis Alfonso Sosa pero no había nada que hacer contra la decisión tomada por una directiva que en los tres años que tiene al frente parece haberse equivocado muy poco y a la que le bastaron un par de años para regresarnos al sitio en el que todos queríamos estar -los títulos vendrán después-.

El discurso de Ambríz a su llegada tampoco me ha gustado. Y es que aún cuando es un histórico del equipo -lo es, sin duda- no se ha cansado de repetir que él ayudó a poner las estrellas en el escudo, cosa que si bien es cierta, no 'juega' ya en su rol de Director Técnico, mismo en el que al menos aquí en Necaxa, comienza de cero.

Yo podría pensar que Ignacio Ambríz no es el técnico ideal para pensar en pelear campeonatos o para mostrar un futbol espectacular -en su carrera no lo ha hecho-, pero su etapa como técnico del equipo recién comienza y sería absurdo descalificarlo por su pasado en otros clubes -mismos que dicho sea de paso, no me interesan- o por lo que podamos creer.

No me gustó su llegada, pero de eso a que espere que le vaya mal al equipo hay diferencia. No voy a 'reventar' a Ignacio Ambríz solo porque sí, o porque no me haya gustado que él haya sido el elegido, porque el hecho de ir en contra él, sería ir en contra del equipo, y mas allá de nombres dentro o fuera de la cancha, mi afición es por Necaxa, contra el que nunca voy a ir. Las declaraciones de Ambríz en el pasado o en el presente con Necaxa están de más en este momento y lo que hablará por él serán los resultados que arroje su trabajo.

Aquellas declaraciones en San Luis de las que hago mención son ya pasado, y como tal hay que dejarlas atrás. De igual manera, hay que dejar atrás el pasado reciente de Luis Alfonso Sosa como técnico del equipo. Menciono esto porque desde el domingo no he leído comentarios que no sean "Él si supo manejar el partido", "Sosa se hubiera echado atrás con el primer gol", "Sosa también ganó en Veracruz", "Ambríz mostró que es mejor estratega que Sosa", y varias cosas por el estilo.

Las comparaciones siempre van a existir, pero me parece absurdo el comparar a dos técnicos en base al desarrollo y resultado de un partido que se disputó con apenas tres meses de diferencia pero en el que los equipos son completamente diferentes. Los comentarios de los Antí-Sosa y de los Anti-Ambríz hoy salen sobrando porque ni los unos, ni los otros van a dictar el desenlace del equipo en el Apertura 2017.

Repito, en mi opinión, Luis Alfonso Sosa había hecho lo suficiente para mantenerse en el banquillo del equipo y su salida fue injusta. No obstante, Ignacio Ambríz es el presente y es al que hay que reconocer o criticar de ahora en adelante. El pasado hay que dejarlo atrás, y hay que demostrar que como se dice, existe una 'hermandad necaxista' dejándonos de ataques sin sentido, mismos que en nada ayudan o influyen en lo que sucede en Necaxa.

Sunday, July 9, 2017

Patrioterismo al extremo, y una indignación infundada

Hace exactamente una semana concluyó la décima edición de la Copa FIFA Confederaciones -quizá la última que se realice- y la Selección Mexicana culminó ubicada en la cuarta posición de un torneo que convoca a los campeones de las seis confederaciones futbolísticas que integran al máximo organismo del fútbol a nivel mundial: FIFA.

El resultado final del 'Equipo de Todos' en el torneo ha puesto una vez más a Juan Carlos Osorio en el ojo del huracán, toda vez que él es señalado como responsable de lo que para muchos es un fracaso, considerado así por muchos desde antes de llegar a instancias definitivas del torneo.

Las críticas sobre el técnico nacional no son nuevas, y durante el torneo estuvieron presentes por el estilo de juego mostrado por el equipo durante algunos lapsos de los partidos y especialmente por las contantes rotaciones de jugadores, mismas a las que se atribuye el desempeño y los resultados de su proceso.

¿Es Juan Carlos Osorio el culpable de un 'fracaso' futbolístico del Tri?, ante los ojos de los aficionados y de los medios de comunicación, no me queda duda de que sí, pero un cuarto lugar en un torneo en el que compiten el Campeón del Mundo, el Campeón de Europa y el Campeón de América, no me parece un fracaso como tal, sino una dosis de realidad, y un resultado normal.

Si, México es el actual Campeón de Concacaf, pero ¿ya se le olvidó a esa 'exigente' afición, a los expertos críticos de televisión, y a infinidad de entrenadores, la manera tan penosa en la que se obtuvo el título de mano de ayudas arbitrales en los últimos juegos de Miguel Herrera como Director Técnico de la Selección Nacional?.

A Juan Carlos Osorio, técnico colombiano se le ha criticado todo. Que si dijo tal cosa, que si hizo cambios, que si esto, y que si aquello, cosa que me hace recordar la manera en la que se criticaba a Ricardo Lavolpe a lo largo de su etapa como técnico nacional, misma que concluyó con la Copa del Mundo de Alemania 2006. ¿Por qué no se criticó igual a Hugo Sánchez, Javier Aguirre, Miguel Herrera, y a todos los interinos que estuvieron entre ellos?

Me da la impresión de que a Osorio injustamente, no sé si su calidad de extranjero sea una de las causas, ya que los mexicanos suelen guardarse los elogios para otros mexicanos. Al actual técnico nacional, hoy le critican hasta la falta de clase que mostró en el duelo por el cuarto puesto ante Portugal, cuando encaró al cuarto árbitro y le dijo algunas palabras al oído. En cambio a Miguel Herrera, su antecesor en el cargo y un auténtico 'Rey del barrio', se le aplaudía por mostrar carácter, cada vez que tomaba actitudes que parecían más las de un cavernícola, que las de un entrenador de fútbol.

Al menos en el banquillo de la Selección Mexicana, al extranjero se le critica hasta por respirar, y al mexicano se le aplaude por no dejar respirar a los demás. Eso, es patrioterismo. Lavolpe, Eriksson, Osorio, y otros más han sido jusgados en muchas ocasiones sin provocación alguna o sin fundamentos. Desde luego, lo que hace cada uno en su trabajo es cosa aparte, pero las críticas no son iguales y no se mide el desempeño con la misma vara de los foráneos, como de los mexicanos.

Está claro que a muchos aún les duele la eliminación sufrida a manos de Chile en la Copa América Centenario, y es que si bien, el caer 7-0 no puede hablar muy bien de la fortaleza futbolística y mental de un equipo, tampoco es para cortarse las venas o rasgarse las vestiduras, porque esto sigue siendo fútbol y nada más. Hoy, a Osorio se le critica por un cuarto puesto en un torneo FIFA y por haber caído ante Alemania y Portugal, cuando ambos resultados debieran ser considerados como normales.

México no es una potencia futbolística y aún cuando todos gustan de envalentonarse previo a partidos importantes, la realidad queda a la vista al término de éstos. Si, Alemania ganó 4-1 y Portugal les arrebató de manera increíble un triunfo que tenían en la bolsa al minuto 90 del partido, pero el hacer dramas o a exigir la cabeza del técnico, es absurdo. Y creo que no es algo que suceda exclusivamente con la Selección Nacional, ya que en Liga MX a mi me tocó vivirlo de cerca con una afición que se la pasó exigiendo la cabeza del tipo que regresó a Necaxa a Primera División y que sumó 47 puntos que nos han alejado de zona de descenso.

Volviendo a la Copa FIFA Confederaciones, A Osorio se le critican los cambios previo a enfrentar a Nueva Zelanda y la manera en la que se complicó ese partido. Se le criticó que ante Alemania no metiera a Carlos Vela, el que para muchos es el mejor futbolista mexicano de la actualidad, y se le criticó por caer ante los propios alemanes en un partido que se dominó. Criticar los cambios no lo entiendo, ya que según los medios y aficionados, en México hay 432 cracks de clase mundial; en cuanto a Vela, éste no hizo ninguna diferencia ante Portugal; y respecto a Alemania, ¿Qué decir?, Alemania es Alemania siempre. Los teutones representaron la dosis de realidad que el mexicano se niega a ver.

El criticado proceso de Juan Carlos Osorio al frente de la Selección Nacional tiene a México muy cerca de una nueva Copa del Mundo, sin sufrimientos como sucedió en los últimos dos procesos, 'caminando', como alguna vez dijera Ricardo Lavolpe en la Eliminatoria rumbo a Alemania 2006, última que se vivió con tranquilidad hasta ahora. Pero no, para el mexicano, eso es poca cosa, porque es Concacaf. Y si, puede ser, salvo porque Concacaf es la realidad de una Selección Nacional que no es parte de la élite futbolística.

Tuesday, July 4, 2017

'Fuerza Necaxa'

Ha pasado ya más de un año desde que Necaxa volviera a Primera División tras cinco largos -y en verdad, muy difíciles- años en el Ascenso MX, tiempo durante el cual, todos estuvimos más al pendiente de lo que sucedía en ‘nuestra’ liga, que en la que goza de todos los reflectores.

El año de Necaxa en la Liga MX fue en términos generales bueno, y por más de que por momentos gran parte de la afición gustara de tirarse al drama a la menor provocación, se cumplieron los objetivos -el principal, la permanencia- pese a algunos altibajos vividos a lo largo de la temporada 2016-2017. Durante el año de vuelta se tuvo a un par de referentes de la liga en nuestro equipo y se sumaron impensados 47 puntos que nos dan cierto colchón para una nueva lucha por la permanencia -seamos honestos, si cuando se ascendió nos hubieran dicho que haríamos 47 unidades y que jugaríamos una Semifinal, todos habríamos firmado-.

Al margen de todo ello, y apenas unos días después de que concluyera el Clausura 2017 para el equipo, Necaxa fue noticia gracias a ‘Fuerza Necaxa’, serie producida por Mexicanal, y que fuera originalmente transmitida en Estados Unidos para hacer su aparición en Netflix, con lo que el equipo ganó espacios en diferentes medios.

La serie es una especie de reality/documental sobre el último año de Necaxa en el Ascenso MX y nos muestra imágenes de lo que ocurría en el día al día del club, y de los jugadores, teniendo como punto de partida la caída en la Final de Ascenso de 2015 ante Dorados de Sinaloa, hecho que golpeó fuerte tanto al club, como a los aficionados, y que es el comienzo de la historia de un año que tuvo un final feliz la noche del 21 de mayo de 2016 en Ciudad Juárez.

Sin lugar a dudas, podríamos considerar a 'Fuerza Necaxa' como un documento valioso para los necaxistas, y es que la serie, a través de sus 13 episodios nos permite entrar a la intimidad del equipo, esto, mientras nos hace recordar -ahora, y no cuando se transmitió originalmente- a jugadores que no se encuentran ya en nuestros Rayos, como el capitán Luis Alberto Padilla o Everaldo Barbosa, quien se nota le ponía ambiente al vestidor -advertencia: otros menos queridos como Marvin de la Cruz, también aparecen-.

En pocas ocasiones, un equipo profesional permite que se entre más allá de lo que vemos desde un televisor o en la tribuna, y a través de esta serie podemos entrar a las charlas técnicas previas a los partidos, al hotel de concentración, y los mismos viajes del equipo. Incluso fuera de las canchas nos permite conocer la relación que se da entre algunos de los integrantes del plantel y sus familias.

La serie en términos generales me pareció muy buena, aunque me parece que pudo haber sido aún mejor. Por ahí noté un par de errores en la edición, ya que en algún momento se habla de un partido que ya había pasado. Además de esto, uno de los momentos cumbre del año del regreso a Primera División está ausente, me refiero a la Semifinal de Copa MX en la Ciudad de México, ante Cruz Azul, mismo que sin ser propiamente un partido que fuera parte de ese camino, si fue un encuentro que hizo que los medios nacionales voltearan a ver una vez más al equipo.

Imperdonable que no aparezca ese momento y que si hayan aparecido encuentros de la fase de grupos -el también emotivo duelo de Cuartos de Final ante Tijuana también está ausente-. De hecho, cuando en la serie se llega a la Final del torneo copero, durante el viaje, Brayan Beckeles hace referencia a la ausencia de la cámara durante aquella parte de la temporada al decir "volviste".

Algunos pequeños detalles que se fueron en el camino son los que le restan un poco a la serie, y es por ello que digo que pudo ser aún mejor de lo que es. No obstante, no podemos sino agradecer que haya sido Necaxa el primer equipo que nos permite entrar a su intimidad, e ir varios pasos más de lo que como aficionados podemos vivir cada fin de semana. ¿Por qué agradecer?, sencillo, porque es Necaxa el equipo que nos interesa a nosotros.

'Fuerza Necaxa' es como dije, un documento valioso que nos lleva de la triste derrota ante Dorados, al emotivo triunfo ante Bravos, mismo nos permitió volver a Primera y que se dio como suele gustarle a nuestro equipo, jugando de visita y con todo en contra.